Por fin tengo espacio y tiempo como para ponerme a escribir. Pero siento que mi ser se tiene que limpiar de alguna manera, que estoy arrastrando un algo desconocido. No, ni eso. En lugar de escribir o de concentrarme en los proyectos en los que debería (y quisiera) enfocarme, caigo en los loops de Yutúb. Empecé con un escritor norteño que dizque hizo un repaso de la literatura del Norte de México sin mencionar ni una mujer. Después escuché unos poemas y entrevistas con Raúl Zurita, después pasé a un video de Cecilia Vicuña, luego unas travestis me enseñaron como hacer tostones y posteriormente vi un documental sobre Pinochet hecho por unos franceses y así y así. Por lo menos estuve maquilando libros durante mucho de ese tiempo. Hoy otra vez tengo la oportunidad de escribir o de ponerme a trabajar y sigo envilecido, sigo brincando de un video a otro. De Susana Chávez a Bolaño a Juan Rulfo. Oy, no sé si esto me va a ayudar a escribir. Siento que extraño el español. Que extraño su presencia en mi vida. Aunque claro hablo en espanish con la mayoría de mis queridos, pero igual, extraño el sentirme rodeado de español. Ma da ganas de escribir aquí en el blog de nuevo—como la hacen mis amigas a las que leo en sus blogs. Ay, el blog, tan de otra época. Aunque me da pavor ahora el Feis y no puedo terminar de convencerme nunca a postear allí. Siempre escribiendo y borrando comentarios y posts. Así que bueno, a seguir surfeando y tratando de convencerme a ponerme a (realmente) trabajar.